Fierceness (City Of Light) retomó la senda del éxito y de qué manera. Luego de su opaca actuación en el Holly Bull (G3), el campeón potrillo que antes había propinado una humillación a su generación en la Breeders Juvenile (G1), recuperó esa fuerza en el Florida Derby (G1), con un dominio pleno de la carrera.
Un parcial de 24” favoreció plenamente al favorito que pudo colocarse, temprano en los palos, con un Jhon Velasquez inspirado, en la monta de un potrillo que corrió a placer. Seguido de Catalytic(Catalina Custer), Grand Mo The First (Uncle Mo) en los palos, a dos largos del puntero hasta promediar mitad de carrera. Luego Conquest Warrior ahorrando terreno en la baranda y Hades, conprometido en el grupo de colistas.
En el último cuarto de milla, todo estaba decretado: Era la mejor versión de Fierceness que se disponía a estirar diferencias, con una facilidad que desde ya lo erguía como la ‘vedette’ hacia el Kentucky Derby, es que el crédito del Repole Stable fue una locomotora hacia la meta en un tren endemoniado que cerró en 1’48”2 para los 1800 metros y bajó de 37” los últimos 600.
Razón tenía Jhonny V cuando le consultaba sobre este castaño, si se quiere, de un físico nada deslumbrante, pero como él mismo sentenció, de un talento bárbaro. Catalytic, fue claro escolta, mientras en duelo particular para el tercero pudo Grand Mo The First aguantar el empuje de Conquest Warrior, una nariz en el espejo, mientras Hades, sin pena ni gloria, entregó su invicto desde el quinto.
Ahora la interrogante, Cuál será el Fierceness que contemplaremos en la carrera de las Rosas? Todas las miradas se centran en este sensacional caballo, que cerró a lo grande una jornada memorable de nueve clásicos en GulsftreamPark, alojado en Hallandale Beach.